Mengua el espacio
pendiente de tus huellas.
Un cuaderno
a punto de expiar sus últimas líneas,
un poemario de estelas
sujetas entre hojas,
y un marco gris (la ventana)
como origen
del primer trazo prensado.
Su portada reza
como un amigo.
Su interior, nuestro nido.
A nuestro vestigio confeso,
corolario de inciertos supuestos
donde remitentes y destinatarios
se encuentran repetidos.
Esta libreta marcada a dígitos
apura sus póstumos pasos
con más amor que desconcierto,
como compendio reducido
de fuente de ilusiones y fracasos.
Éstas son sus últimas líneas huecas
del registro de tus labios
mientras otro parejo retoza en espera.
Preciosa la libreta...pero no tanto como ese poema que la acompaña...
ResponderEliminar["Éstas son sus últimas líneas huecas
del registro de tus labios
mientras otro parejo retoza en espera."]...como la vida misma.:)
Siempre dejamos algunas líneas en blanco, sobre todo para no pasar página del todo. Un beso
ResponderEliminar“con más amor que desconcierto,
ResponderEliminarcomo compendio reducido
de su fuente de ilusiones y fracasos”.
Cuando algo se muere da lugar a una nueva ilusión. Las libretas con el tiempo amarillean y terminan no diciendo nada.
Agendas que recuerdan fechas, nombres lugares y hechos, forman parte de un hueco en mis estanterías, mientras duermen ajenas al aquí y al ahora.
Bss
Me ha encantado. Un saludo!!
ResponderEliminarBon día, Manel!!
ResponderEliminarDisculpad mi demora en contestar: como me gusta tanto o más contestar que escribir la creación, prefiero hacerlo cuando no tengo que ir con presión ni cansancio.
Creo que mi cuerpo está cambiando el ritmo nocturno por el diurno. Vivirlo para creerlo, y es que el tiempo no sólo cambia nuestras marcas externas, sino también y principalmente las interiores.
Me resulta curioso que menciones la última frase. Normalmente suele ser resumen emocional de toda la creación; en este caso , quise darle un tono más abierto (bueno, seamos sinceros, me salió así y ya está). Probablemente, estas patitas como otras cosas, fueron/son sorbos de inspiración y aliento.
No es que tenga otro cuaderno para estrenarse, todavía no lo sé, es impredictible porque son como las margaritas salvajes del jardín de la casa de mis padres, sales como les rota y cuando les rota (este año si no llueve, lo veo crudo el tema,por cierto!). De ahí que "retoce":D.
Esta temática me recuerda tu "dry feeling", extraordinario post. De hecho, fue una de esas huellas la que me llevó a él, así lo descubrí. Existen muchos modos de transmitir mensajes, sin duda aquellas más inesperadas son las que nos conquistan. Quizá de las 1.000 huellas o más (no tengo idea...), sólo 20 sean realmente un post dactilar, suficiente para ser y escribirse.
Besos!.
Buenos días, Fernando!.
ResponderEliminarPues no sé si éstas quedarán en blanco , me da a mí que no, porque yo las rellenaré con mis notas:-). Comparto tu mensaje; muchas veces creemos que ya hemos pasado página , y , tras mucho tiempo transcurrido, la historia que creímos sellada para siempre jamás se nos aparece, bien sea con sus últimas páginas no escritas, o como un libro entero en blanco. Son las sorpresas de la vida y de las emociones que nos unen a esa historia.
Sigo pensando que dependerá de la intensidad con la que nos haya atravesado en su momento.
Las páginas en blanco dan juego, no lo había pensado, quizá sea bueno dejarse su última página. En ese caso.... debo empezar otra libreta!:*^^*.
Besos!
Buenos días, Katy!
ResponderEliminarTodas las libretas con el tiempo amarillean y las hojas se ponen otoñales sin llegar a ser invernales. sin embargo, yo pienso que todas nos siguen diciendo algo; algunas incluso cobran más importancia con el tiempo porque en su momento no les prestamos la debida atención o porque desconocíamos sus códigos y no las supimos intepretar.
Las libretas, como los libros, son un compendio de ideas y pensamientos muy distintos. Algunas cobran más peso y son más relevantes que otras para nosotros.
Lo curioso es cuando uno, de la noche a la mañana, se propone iniciar una sin tener idea si sólo tendrá una página repleta, o al final acabará rellenándola!. Y ésta nació así de espontánea, como idea absurda y tonta, sin tener idea no de cómo acabaría, sino de cómo seguiría. De ahí su milagro. En cualquier caso, está muy unida a este blog y a todo lo que se escribe y nos comunicamos en él.
En cambio, comparto contigo que, el cuaderno, el libro, el blog y todo, nunca podrán reemplazar el aquí y ahora. Porque son ajenas a nuestros tiempos presentes salvo en el momento que lo compartimos, ejecutando su escritura:-).
Besos!
Buenos días, Chema!
ResponderEliminarY a mí me ha gustado mucho tu huella por aquí. Quedaste anotado en las respuestas, viste?:(^-*).
Besos!
El cuaderno se agotó. Las huellas de superficie se perderán sin dactilar, ya no tomo nota si no son pisadas con causa real. Un libro a punto de cerrarse.:-).
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