El día que el camino no tenga tus miguitas,
se perderá el rastro de las emociones
que laten en las yemas de nuestras hojas.
Por eso, las recojo con cuidado
y las incorporo en estos pasos.
El día que el camino no tenga tus miguitas,
se perderá el rastro de las emociones
que laten en las yemas de nuestras hojas.
Por eso, las recojo con cuidado
y las incorporo en estos pasos.