jueves, 10 de febrero de 2011

El Sauce Llorón habla y nos cuenta





Si me preguntas por aquel sauce del jardín, te diré

que sus raíces son perennes.

La tierra y las hierbas, flores y matorrales

le hicieron una grieta a medida

donde posar sus tristes carnes escamadas,

sus muñones carcomidos, su piel herida,

sus venas rotas y entumecidas.


Atrás quedaron aquellos tiempos

en los que su copa asemejaba un árbol de manjares,

jardines de recreo con amplias vistas de sombra

y enormes zonas de cobijo cuando picaba el lorenzo.


"Triste soy, y llorar quisiera,

y como árbol sin ojos aguar no puedo.

Sin embargo, aquí mis restos os quedo

para que hagáis de mí una madriguera."
 
 
 
Begoña Gamonal