lunes, 1 de julio de 2013

Traspasa y no se ve




Nada más, tan sólo volver a tu piel
no hay secreto más sencillo que recorrer 
nuestro mundo que amerita los sentidos.
Deleznable es el rencor 
que arranca el arraigo 
surca el aire 
y no es capaz de enraizarse.
Recuerdo en mi símbolo acuático
aquel atardecer de inicio de un patito, 
esos cisnes vencidos
erguidos en mi espejo
No me gusta el mar, dijo,
y yo la entiendo.
Un joven cisne nada con un solo remo
y engaña;
reta su recorrido a una sola membrana
y lo hace por saber
que es capaz de prescindir de su pala.
El amor siempre tiene razones para disfrazarse.
A media mañana 
el sol brinda su luz de espejo 
sobre el que vivir.
El cisne estira sin tapujos su otra membrana.










2 comentarios:

  1. El amor siempre tiene razones para disfrazarse.
    Pero a veces engaña porque nosotros queremos ser engañados.
    Bss

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    Respuestas
    1. Depende como se mire y lo que se entienda por amor, tiene infinitas interpretaciones, Katy.

      Durante un tiempo de observación del pequeño cisne siguiendo a su progenitor, pensé que tenía la pata quebrada; mi sorpresa fue magnífica al verle tras un largo rato con la pata encogida, estirarla y moverla para equilibrarse en el agua. Las apariencias, a veces engañan.

      Besos.

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