viernes, 15 de abril de 2011

De tí, por, aunque

De tí, asimilé sin inculcarme

que la margarita vive de por sí,

y es más feliz con

aunque no depende del sauce.


De él también aprendió

a desaprender sin rencor,

sobrevivir sin hablar

pero sin hablarse por.


A no dolerse por ver

y no ser vista sin más,

hacer lo que quiere hacer,

no estar donde está de más.


Porque la margarita es más feliz con

aunque no depende del sauce.
 
 

Arbol del amor en campo de amapolas- Foto: Begoña Gamonal

2 comentarios:

  1. Hola Begoña, ando ya fuera de este mundo bloguero. Me he tomado una vacaciones para estar con la familia y los nietos aunque no muy lejos del ordenador:)
    Como las margaritas no dependen del sauce pero de vez en cuando el sauce las añora y ellos buscan su sombra.
    Besos y cuidate

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  2. Buenos días, Katy.

    Lo mejor para recargar pilas es alejarse durante un tiempo para volver con las mismas renovadas:-). Yo tampoco escribo al mismo ritmo.

    Las margaritas son independientes aunque esta vez hayan germinado encima de su tronco o al lado. Si no las trata bien, se irán, pero volverán otras:-). Extrapolable a todas las áreas de la vida, estamos de paso, y sólo nos quedamos cuando realmente lo que aflora no es superfluo.

    Besos.

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