Yo si pudiera, sí me ha echaba a diario. Cuando era más joven no me la echaba nunca tampoco; sin embargo con la edad y circunstancias lo encuentro como uno de los momentos más placenteros del día: ya no tengo ansias por dedicarme a cosas más útiles a todas horas, digámoslo así:D.
Una buena descripción de la traída y llevada siesta.
ResponderEliminarYo no me la echo nunca,
Bss
hola, Katy.
EliminarYo si pudiera, sí me ha echaba a diario. Cuando era más joven no me la echaba nunca tampoco; sin embargo con la edad y circunstancias lo encuentro como uno de los momentos más placenteros del día: ya no tengo ansias por dedicarme a cosas más útiles a todas horas, digámoslo así:D.
Besos.