jueves, 15 de noviembre de 2012

Eres color, mi Otoño.




Dispersa en los colores del otoño
tu talle ocre oscuro amarillento
verdea las hendiduras de mis hebras.
Soy el remiendo omiso
en tu falda espinosa,
la voz que se enamora
de tus cuerdas seccionadas.
Soy descosido
fuera de juego
sobre tus hojas.
Soy roto
que, rota,
te rompe.
Yo
tu
nos
y el amor.



4 comentarios:

  1. Este poema es dinámico, original y me encanta el dibujo de la hoja amarronándose.
    Un abrazo :-)

    ResponderEliminar
  2. Ale! me alegro te guste. Tiene rima, jugué con el 11 - 7 - 5- 3 -1:-).

    El dibujo es mi acuarela penosa (no se me da bien dibujar, pero aún menos pintar. Con todo, las hojas son muy agradecidas y se dejan ver).

    Tengo muchas cosas que contarte...celebro que estés cuando hay marejada. Ayer cerré el blog, aunque al final pensé que sería mejor dejarlo abierto. Besos.

    ResponderEliminar
  3. Ser color del otoño tiene doble lectura. A unos nos gustan los ocres pero a otros no. La acuarela es simpática, inocente, casi infantil pero no penosa ni mucho menos. Tiene encanto.
    Bss

    ResponderEliminar
  4. Hola, Katy.

    Ayer por la tarde me fijé en una avenida donde los rayos del sol se filtraban entre un cúmulo de hojas al aire, todas doradas. El ocre cubriendo el atardecer. Me gusta pintar pero pinto fatal, me supone un sobreesfuerzo aguantar el trazo con el pincel, el agua se me va por todas partes de la lámina, y sus churretes de pintura hacen estragos:-).

    Besos.

    ResponderEliminar