sábado, 10 de noviembre de 2012

Cuando era un cuento de Hadas.



Per a "Cuando era un cuento de hadas" en "Meditaciones y Sentimientos" de Begoña Gamonal Flores

Anna Netrebko / A. Dvořák - Rusalka

https://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=MwuNqcKUxto



El devenir del curso del río se torna lento
tras el discurrir del agua
por la erosión de la roca
como  acontecimientos que eclipsan
 la emoción de lo desconocido,
el tacto no descubierto,
los sentidos fantaseados en su brevedad
llamada a perpetuarse en su ideal.

Tan sólo queda acontecer
para descubrir al río risueño
sentado frente a su imaginario descubierto
y, tras el discurrir del agua
por la erosión de la roca,
 afrontar aquellos actos concebidos
bajo el látigo del amor
cuando éste era un cuento de hadas.




4 comentarios:

  1. Muy acertados tu versos a la luz de mi experiencia.
    Muchas cosas eran cuentos de hadas en nuestra mente y bajo nuestra mirada soñadora. Luego despertamos bruscamente a la realidad. Y la fantasías se las lleva el día día como el discurrir del agua más no el ideal.
    "los sentidos fantaseados en su brevedad
    llamada a perpetuarse en su ideal."
    Bss y buen finde.


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  2. Hola, Katy!

    Sí, a veces uno ve situaciones absurdas que no comprende, y en casi todas está esa ceguera transitoria y temporal que el agua se encarga de erosionar a fuerza de devenir y caminar:-). Pero deberíamos, en esos momentos, pensar en no lastimar y lastimarnos tomando decisiones que más adelante nos volverán con el devenir de la erosión y el desgaste del tiempo. Experiencia, sin duda.

    No me notas una voz más triste y profunda que antes, más desangelada?

    Besos, Katy!.

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    1. Ya lo creo, estás menos entusiasta y más melácolicapero lo he achacado al tiempo y a que los poetas sois así un poco.
      ¿O es la experiencia? La erosión también modela.
      A mi el otoño me da mucho bajón. Espero que sea pasajero.
      Cuídate de verdad.
      Bss

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    2. Tienes razón, Katy. Gran parte de los que nos gusta escribir tenemos cuerdas melancólicas. Somos como linternas que poco a poco vamos apagando nuestro entusiasmo con el devenir de la vida.
      Puede ser influjo del cambio de estaciones también. Cuidémonos pues:-).

      Besos.

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