lunes, 28 de febrero de 2011

Angustia

 Tu peso desplomándose sobre mi aire, y su ligereza aliviando mi aturdimiento. Triste salto la del ave que no planea su vuelo.


Foto: Begoña Gamonal

4 comentarios:

  1. Me gusta Begoña, y me invita a navegar.
    La brisa fresca entra con hermoso sonido trayendo consigo nuevos aires de luz y esperanza a la vez que espanta las nubes oscuras y ahuyenta el aire viciado de nuestro horizonte.
    A veces no se puede planificar el vuelo pero si mantenerse en el aire planeando hasta que cambie la dirección del viento.
    Un beso y feliz semana

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  2. Alivio el que se siente una vez despegado, alusión a la realidad cuando estamos en lo alto, vértigo cuando bajamos y un regusto amargo (quizá porque queremos más) cuando aterrizamos al fin.

    Pero mientras el vuelo dure, no habrá pájaro que vuele mejor que nosotros, no habrá viento demasiado fuerte... y el peso de un pajarillo ajeno será sin duda el dulce sabor del peso que parece disminuir nuestra propia angustia.
    besitos :)

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  3. Buenos días, Katy.

    Me encanta tu mirada. Es distinta a la que impregnó estos versos, y eso aún me gusta más, le da más juego.
    Me quedo con ese vuelo imprevisto, tienes razón; en cualquier momento puede virar hacia otra dirección, será cuestión de tiempo.

    Besos.

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  4. Buenos días, Emperatriz.

    Me gusta ese optimismo!. En realidad ese peso era una losa y el vuelo inminente lo aligeraba; sin embargo, un vuelo sin ser planificado a veces no es lo suficientemente deseado; dejemos en stand-by qué pasará durante el vuelo.

    Besos!

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